Con el apoyo de la Agencia Córdoba Cultura, la Asociación Cultural Relatos del Viento impulsa un rescate de la tradición de los pueblos originarios cordobeses para evitar la pérdida irreparable del patrimonio intangible.
En el Museo de Alpa Corral se realizó una jornada de capacitación docente titulada “La revalorización de las tradiciones orales como estrategia educativa”, organizada por el museo, dependiente de la Agencia Córdoba Cultura, junto con la Biblioteca Provincial del Maestro (Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba) y la Asociación Cultural Relatos de Viento.
Los talleres estuvieron a cargo de Patricia Rionda y Pablo Rosalía, integrantes de la Asociación Civil y Cultural Relatos del Viento. La intención del taller fue exponer la importancia de la perpetuidad de las tradiciones orales en el ámbito educativo. ¿Por qué es tan importante? Pregunta que Pablo Rosalía ayuda a responder en diálogo con Cultura Córdoba.
Al hablar de tradición oral en la provincia de Córdoba, se hace referencia a aquellas tradiciones heredadas de las comunidades aborígenes de este territorio (comechingones, sanavirones y ranqueles). Rosalía explica: “Entendemos por tradiciones orales el universo de conocimientos, saberes, sabidurías, creencias y valores de una comunidad que se mantienen a lo largo del tiempo sin sufrir alteraciones estructurales, y se transmiten mediante la palabra y el ejemplo en práctica. Todos somos portadores de tradiciones orales, que se alimentan desde los pueblos originarios: el uso de un yuyo para curar una dolencia, el antiguo nombre de las estrellas y una infinidad de saberes más”.
Sin embargo, la tradición oral se ve amenazada por múltiples factores, entre ellos, la falta de registro escrito de las lenguas autóctonas y la destrucción ambiental. “Cuando destruimos el paisaje autóctono y desarticulamos a las sociedades campesinas que viven en él, estamos destruyendo la médula de nuestra identidad”, asegura Rosalía.
Desde el aula
Para evitar la pérdida irreparable del patrimonio intangible, la Asociación Civil y Cultural Relatos del Viento fortalece las identidades regionales. En este sentido, el ámbito educativo juega un papel clave: “La revalorización de las tradiciones orales en el aula es una herramienta perfecta para integrar los distintos ámbitos de conocimientos y habilidades”.
¿Cómo pueden convertirse las tradiciones orales en estrategias educativas? Pablo Rosalía menciona algunos ejemplos: “Mediante Matemática se recopilan antiguos acertijos numéricos que la gente de antes recitaba para sacar sus cuentas; Lengua indaga adivinanzas, cuentos y seres mitológicos; Ciencias Naturales se pregunta sobre los conocimientos ambientales que permiten pronosticar el cambio del tiempo, por ejemplo; y Música recupera los aros, relaciones y viejas letras que se pierden en el tiempo”.
Rosalía remarca que estos proyectos tienen “un maravilloso poder de integración con la comunidad, ya que los niños salen a recopilar con sus docentes, aprenden de sus mayores y estos son jerarquizados en el rol de anciano-sabio”.
El habla de Córdoba
“En referencia a la tonada cordobesa, se piensa que es un fenómeno de sustrato indígena ya que, como lo demuestra la experiencia, es más fácil cambiar de lengua que de entonación. Por eso, el hombre autóctono, al cambiar la lengua nativa (indígena) por la que le impuso el conquistador (español), lo hizo manteniendo dentro de la nueva la entonación de la anterior”, dice Antonio Catinelli en una nota publicada en Guía de Córdoba Cultural (1980).
“En cuanto al vocabulario que los cordobeses heredamos, las lenguas autóctonas, como la sanavirona y la comechingona, prácticamente no han influido en el vocabulario cordobés. ¿A qué se debe la desaparición de estas lenguas indígenas primitivas? No es responsabilidad absoluta de la acción de la lengua española, sino de la acción de otras lenguas indígenas”, opina Catinelli.
En ese sentido, Rosalía sostiene que en la actualidad se utilizan palabras “quechuas, kakanes, guaraníes, mapuches, y también vocablos pertenecientes a las lenguas y dialectos hablados en lo que hoy conocemos como Córdoba”.
A propósito, estas son algunas de esas palabras que los cordobeses usamos a diario, tal vez, sin identificar su origen: ojota, sandalia de cuero; pupo, ombligo; quena, flauta india de caña o hueso; pampa, llanura; pirca, pared de piedra; choclo, maíz; y yapa, dar algo extra y gratis. En cuanto al acento, tan reconocible, Rosalía señala que está conformado en parte por un sustrato aborigen. Estas palabras ofician de ejemplo para demostrar que, tengamos o no sangre originaria que corra por nuestras venas, todos formamos parte del mismo suelo.
Relatos del viento…
Desde 2005, la Asociación Civil y Cultural Relatos del Viento desarrolla proyectos relacionados a la puesta en valor de la cultura campesina y su tradición oral. Relatos del Viento recopila y difunde la cultura que se transmite mediante la oralidad. Los interesados en comunicarse con la asociación pueden visitar su sitio web o dirigirse a España (Sur) 365, CP 5223, Colonia Caroya. Teléfonos: (03525) 46-2710 o (03521) 154-44968 / 9. Correo electrónico: relatosdelviento@gmail.com
Fuente: La Voz